Un estudio norteamericano revela que los sacerdotes son el colectivo más feliz y satisfecho con su vida y profesión
La famosa revista Forbes ha publicado recientemente un artículo titulado “The ten happiest jobs” (Los diez trabajos más felices), recogiendo un estudio realizado por la Universidad de Chicago. Dicho estudio enumeraba las siguientes diez profesiones como las que más felicidad aportan a quienes las desempeñan.
Encabezan la lista de los más felices los sacerdotes, seguidos por los bomberos, fisioterapeutas, escritores, profesores de Educación Especial, profesores, artistas, psicólogos, agentes de servicios financieros y conductores de vehículos especiales.
Al mismo tiempo, el estudio presenta las diez profesiones más infelices: director de tecnología de la información, director de ventas y marketing, productor-manager, desarrollador web, técnico especialista, técnico en electrónica, secretario jurídico, analista de soporte técnico, maquinista y gerente de marketing.
Curiosamente, las profesiones más felices tienen en común una baja remuneración, un bajo prestigio social, un fuerte componente vocacional y un marcado elemento humano y social, y las más infelices vienen acompañadas de una alta remuneración económica y un alto prestigio social.
Un libro recientemente publicado, ¿Por qué los sacerdotes son felices?, insiste en la misma idea. Su autor, Stephen Rossetti, sacerdote y psicólogo, ha llegado a esa conclusión después de hacer entrevistado a 2500 sacerdotes de todo el mundo. Contrariamente a lo que suele aparecer en los medios de comunicación, los encuestados consideran el celibato como un aspecto positivo en sus vocaciones. «Las tragedias y los escándalos llenan las portadas pero los rostros de los muchos sacerdotes felices no lo hacen», asegura Rosetti.
La encuesta de Rosetti revela que, exactamente, el 92,4% de los sacerdotes manifiestan un grado alto de felicidad y satisfacción con su vida, mientras que el 50% de los entrevistados que desempeñan profesiones civiles se declararon infelices con su trabajo.
¿Cuál es el secreto de esta felicidad sacerdotal? Rosetti es claro y rotundo: “La secularización engendra una especie de opinión negativa hacia la religión organizada. Existe la creencia en la actualidad de que practicar la fe es algo opresivo y triste. Algunos pensadores modernos sugieren que la única manera de encontrar la felicidad humana es liberarse de las imposiciones de la religión. Consideran la religión como algo restrictivo para la verdadera libertad y humanidad de la persona. Por tanto, usando la lógica ser un sacerdote debe ser la cosa más triste del mundo.
De esta manera, escuchar que los sacerdotes están entre las personas más felices del país es increíble. El hecho de la felicidad clerical es un desafío poderoso y fundamental para la mentalidad secular moderna. El pensamiento laico busca esta alegría pero lo hace en lugares equivocados. Lo único que tiene sentido es que estos hombres, que han dedicado sus vidas al servicio de Dios y al de los demás en la fe católica como sacerdotes, han sido completados lenta y suavemente por Dios con una felicidad y alegría interiores. Jesús nos prometió esta alegría y es una verdad demostrable.”
En este libro, se analizan muchos otros elementos que intervienen en esta felicidad, como la centralidad de la vida espiritual y la relación con Dios, la importancia de las relaciones humanas y de las relaciones de ayuda y entrega, y el celibato. Aquí pueden seguir leyendo sobre este libro.
En definitiva, el sacerdocio no garantiza la riqueza económica pero sí la felicidad. Que no se enteren los chicos que están pensando en este momento por dónde orientar sus vidas…
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